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martes, 2 de octubre de 2012

La Ley de la Atracción!


LEY DE LA ATRACCIÓN.


La ley de la atracción; es la idea de que los pensamientos (conscientes o inconscientes) influyen sobre las vidas de las personas, argumentando que son unidades energéticas que devolverán a la persona una onda similar.

La frase "ley de la atracción" ha sido utilizada por algunos escritores, aunque el sentido con el que se usa actualmente es diferente del original.

La mayoría de los autores asocian a la ley de la atracción con la frase "te conviertes en lo que piensas", usualmente aplicado al estado mental del ser humano: Según los partidarios de dicha ley, esto significa que los pensamientos que una persona posee (sean estos conscientes o inconscientes), supuestamente provocan las emociones, las creencias y consecuencias, es decir, los pensamientos son la causa y los sentimientos los efectos.

A este proceso se lo describe como "vibraciones armoniosas de la ley de la atracción", o "tú obtienes las cosas que piensas; tus pensamientos determinan tu experiencia".

Esta frase está relacionada con las creencias y prácticas de la nueva era, de la cual surge su definición más usual,[cita requerida] pero también tiene un desarrollo en otros campos esotéricos como lo son el hermetismo y la teosofía.

La Ley de Atracción ha sido popularizada en los últimos años por el libro y la película homónima El secreto (2006), pese a la cantidad de críticas recibidas en parte por su nula base científica o por el lucro que las obras han aportado a sus autores.



miércoles, 23 de mayo de 2012

AUTOESTIMA


QUÉ ES LA AUTOESTIMA.


La AUTOESTIMA es un tema muy importante a la hora de hablar de Liderazgo, Comportamiento y Conducta Humana, aunque pocas veces se toma en cuenta.

El significado de Autoestima puede entenderse a partir de varios niveles, el energético y el psicológico.

Desde el punto de vista energético, se entiende que:

Autoestima es la fuerza innata que impulsa al organismo hacia la vida, hacia la ejecución armónica de todas sus funciones y hacia su desarrollo; que le dota de organización y direccionalidad en todas sus funciones y procesos, ya sean éstos cognitivos, emocionales o motores.

De aquí se desprende:
_ Existe una fuerza primaria que nos impulsa hacia la vida.
_ Esa fuerza posibilita la realización de las funciones orgánicas armónicamente.
_ Esa fuerza nos permite desarrollarnos.
_ Esa fuerza nos permite tener una organización, una estructura.
_ Esa fuerza es responsable de nuestros procesos de funcionamiento, y tiene que ver con nuestros pensamientos, nuestros estados emocionales y nuestros actos.

Desde el punto de vista psicológico, puede decirse que:

Autoestima es la capacidad desarrollable de experimentar la existencia, conscientes de nuestro potencial y nuestras necesidades reales; de amarnos incondicionalmente y confiar en nosotros para lograr objetivos, independientemente de las limitaciones que podamos tener o de las circunstancias externas generadas por los distintos contextos en los que nos corresponda interactuar.

De aquí se desprende lo siguiente:
_ La Autoestima es una disposición, un contenido, un recurso natural en el ser humano.
_ La Autoestima es desarrollable.
_ La Autoestima sólo existe relacionada con la experiencia de la vida.
_ La Autoestima está relacionada con el hecho de estar conscientes de nuestras
   potencialidades y necesidades.
_ La Autoestima está relacionada con la confianza en uno mismo.
_ Existen necesidades reales y otras que no lo son aunque a veces así lo pensemos.
_ La Autoestima está relacionada con el amor incondicional hacia uno mismo.
_ La Autoestima orienta la acción hacia el logro de los objetivos y el bienestar general.
_ Podemos tener limitaciones y a pesar de ello tener Autoestima.
_ Los eventos externos, las contingencias, no necesariamente deben afectar nuestra
   Autoestima., al menos no de manera estable o permanente.

Otros conceptos de Autoestima, relacionados de alguna forma con los que ya hemos expuesto arriba, sugieren que:

_ Es el juicio que hago de mi mismo.
_ La sensación de que encajo y de que tengo mucho por dar y recibir.
_ La convicción de que con lo que soy basta para funcionar; que no tengo que
    incorporar nada nuevo a mi vida, sino reconocer aspectos de mí que no he
    concientizado, para luego integrarlos.
_ La reputación que tengo ante mí mismo.
_ Es una manera de vivir orientada hacia el bienestar, el equilibrio, la salud y el respeto
    por mis particularidades.

Para efectos de facilitar la comprensión de todo lo expresado anteriormente, asumiremos que la Autoestima es siempre cuestión de grados y puede ser aumentada, ya que si lo vemos con cuidado, concluiremos que siempre es posible amarnos más, respetarnos más o estar más conscientes de nosotros y de la relación que tenemos con todo lo que nos rodea, sin llegar a caer en el narcisismo o egoísmo, que es cuando sólo podemos amarnos a nosotros mismos. Por eso utilizaremos expresiones como aumentar, elevar o desarrollar la Autoestima, para aludir al hecho de que alguien pueda mejorar en los aspectos citados.

De manera que sí es posible una potenciación de este recurso de conocimiento, aceptación y valoración de uno mismo.

Cuando nos referimos a personas o situaciones de poco amor o respeto hacia nosotros mismos, utilizaremos los términos "DESVALORIZACIÓN" o "DESESTIMA", como palabras que se refieren a una manera inconsciente de vivir que niega, ignora o desconoce nuestros dones, recursos, potencialidades y alternativas.
También es conveniente aclarar, que podemos tener comportamientos de baja Autoestima, en algún momento, aunque nuestra tendencia sea vivir conscientes, siendo quienes somos, amándonos y respetándonos. Puede también suceder lo contrario: vivir una vida sin rumbo, tendiente al Autosabotaje y a la inconsciencia, pero podemos experimentar momentos de encuentro con nuestra verdadera esencia. Fragmentos de tiempo de inconsciencia y desconfianza en uno, no son igual que una vida inconsciente regida por el miedo como emoción fundamental. Lo uno es actitud pasajera, lo otro es forma de vida. Hay que distinguir.

CÓMO SE FORMA LA AUTOESTIMA.

Desde el momento mismo en que somos concebidos, cuando el vínculo entre nuestros padres se consuma y las células sexuales masculina y femenina se funden para originarnos, ya comienza la carga de mensajes que recibimos, primero de manera energética y luego psicológica.

Debido a que los pensamientos y emociones son manifestaciones de energía y en el organismo se presentan en forma de reacciones eléctricas y químicas, cada vez que una mujer embarazada piensa o siente algo con respecto al niño en formación, su cerebro produce una serie de químicos que se esparcen por todo su cuerpo y que la criatura recibe y graba en su naciente sistema nervioso, sin tener la suficiente consciencia como para comprender o rechazar lo que recibe a través de un lenguaje químico intraorgánico.

El hecho de que alguno de los progenitores, por ejemplo, asuma como un problema la llegada del niño, es captado por éste emocionalmente, y su efecto formará parte del archivo inconsciente del pequeño y tendrá repercusiones más adelante, cuando reaccione de diferentes formas y no logre comprender las causas generadoras de sus conflictos. Igualmente, cuando ya se ha producido el alumbramiento, todo estímulo externo influirá en el recién nacido y le irá creando una impresión emocional que influirá sus comportamientos futuros. Los padres y otras figuras de autoridad, serán piezas claves para el desarrollo de la Autoestima del niño, quien dependiendo de los mensajes recibidos, reflejará como espejo lo que piensan de él y se asumirá como un ser apto, sano, atractivo, inteligente, valioso, capaz, digno, respetado, amado y apoyado o, por el contrario, como alguien enfermo, feo, ignorante, desvalorizado, incapaz, indigno, irrespetado, odiado y abandonado. La forma como nos tratan define la forma como nos trataremos, porque esa es la que consideraremos como la más normal.

Con la llegada de la pubertad y la adolescencia, se da la bienvenida a la sexualidad y a la necesidad del joven de encontrarse a sí mismo. Se inicia la llamada "brecha generacional" y el tránsito hacia una mayor definición de la personalidad. Esta etapa es crucial ya que en ella surgen con fuerza la competencia y el deseo de ser mejor que los demás. El joven experimenta una gran necesidad de aprobación por parte de su grupo cercano y aprende a dirigirse hacia quienes lo aplauden y a huir de quienes lo pitan. Desarrolla, con tal de ser querido, conductas muy específicas que se generalizarán hacia la vida adulta.

El ingreso al mundo laboral complica el asunto de la formación y manifestación de la Autoestima, ya que en ese contexto se nos mide por lo que hacemos y no por lo que somos. Si produces, te quedas y si no te vas. Esa es la medida cuando de dinero se trata.

Finalmente en la pareja y el matrimonio se expresa mucho de lo aprendido en los años precedentes: grabaciones, condicionamientos, tradiciones; lo que fue vertido en el molde durante muchos años y que hemos llegado a creer que somos. En este tiempo, formamos parte de una sociedad uniformada en la que muchos han renunciado a expresar su originalidad y tienen ideas fijas de las cosas, que casi siempre siguen aunque no les funcionen. La inconsciencia y falta de comprensión de lo que ocurre, induce a culpar, a resentir, a atacar, a agredir a los demás, a quienes se ve "como malos que no nos comprenden".

Para entonces, ya hemos construido una imagen de nosotros (autoimagen), puesto que habremos aprendido una forma de funcionar, y llevamos como marca en la piel de vaca, el sello de lo que creemos que podemos o no ser, hacer y tener.